Este cambio de paradigma (Ta-
rrow, 2004) configuró una red distribuida
que se expresó en las calles y en las redes,
donde “la información y las imágenes fue-
ron omnipresentes y sobreabundantes,
pero sus fuentes escazas” (Hardt & Negri,
2004: 301). La opinión pública minimizó
la represión, pero las plataformas digita-
les la denunciaron
33
.
4. Conclusiones
4.1 Comprender las redes sociales
desde la perspectiva sociológica busca
desmitificar su influencia (Morozov,
2011) pasando del análisis de las platafor-
mas digitales al de los procesos que están
detrás, en un contexto donde su alcance
es todavía incipiente
34
. Según un reciente
estudio, apenas 2% de usuarios habla de
política en Twitter, 22,3% en Facebook y
16,5% en WhatsApp
35
.
4.2 La posverdad es un concepto
anterior a las redes sociales, que surgió a
la luz del manejo informativo en Vietnam,
donde Arendt (2018) la definió como ver-
dad factual, que al parecer no es mono-
polio de los medios ni de las redes sino del
poder político.
4.3 Durante las revueltas, la opinión
pública “se aproxima a las víctimas llamán-
dolas por sus nombres y a los victimarios
los denomina en plural como una masa in-
diferenciada”
36
(Hurtado, 2005: 72). Sin
embargo, en 2019 las víctimas no fueron
los manifestantes fallecidos, sino los poli-
cías heridos violentamente por aquéllos
37
.
4.4. Según la tabla elaborada, en
2005 y 2019, la incidencia de los medios
fue alta, pero con sentidos distintos. En
2005 dieron amplia cobertura a los oposi-
tores a Gutiérrez y posteriormente a los fo-
rajidos
38
. En 2019, los medios fueron
portavoces del gobierno enfatizando el
vandalismo de la protesta y reiterando el
respeto al status quo. La censura fue a las
plataformas digitales
39
. El 30S, en cambio
impuso una alta censura a los medios silen-
ciándolos. Las redes alcanzaron incidencia
media, pero en apoyo de la versión oficial.
4.5 Durante las revueltas de octubre
de 2019 la posverdad fue cuestionada por
la acción colectiva de los manifestantes.
En 2005 con el uso alternativo de un
medio tradicional (La Luna). En 2019,
con la ebullición de las plataformas digi-
tales. Por el contrario, en 2010, la versión
oficial se impuso sobre los medios y la ac-
ción colectiva, sacrificando su significado.
Textos y contextos Nº 20
34 • Mayo 2020 - Octubre 2020
WILSON BENAVIDES VÁSQUEZ
33 De forma similar al 30S, el gobierno de Moreno también denunció un supuesto intento de golpe de Estado en su contra orquestado,
esta vez, por autoridades y militantes del movimiento Revolución Ciudadana del ex presidente Correa. La prefecta de Pichincha, Paola
Pavón, el ex asambleísta Virgilio Hernández y el activista político Christian González, fueron detenidos acusados del delito de rebelión,
posteriormente modificado al de instigación. Los asambleístas Gabriela Rivadeneira, Soledad Buendía, Carlos Viteri y Luis Molina (al-
terno) pidieron asilo en la embajada de México en Quito y actualmente ya se encuentran en ese país. Los detenidos fueron liberados
con medidas sustitutivas a la prisión preventiva como usar grillete electrónico y presentarse periódicamente ante un juez. Ningún di-
rigente de la CONAIE ha sido detenido, pero se han abierto investigaciones en su contra.
34 De acuerdo con la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV)-2014 del INEC, 41,4% de ecuatorianos mayores de 12 años tenía una cuenta
en redes sociales. De este porcentaje, 97,9% en Facebook; 33,1% en WhatsApp y 20,4% en Twitter.
35 Cultura Política de la Democracia en Ecuador y las Américas 2018/19 publicado en 2020. Para este dato, se basó en una encuesta del
Barómetro de las Américas LAPOP 2019, realizada a 1.533 ciudadanos mayores de 16 años.
36 En 2005 la figura de Julio García, fotógrafo chileno fallecido por asfixia durante las protestas contra Gutiérrez se convirtió en un ícono
de los forajidos. En 2010, el gobierno exaltó la imagen de Juan Pablo Bolaños, el único civil fallecido en las manifestaciones de respaldo
al oficialismo, así como del policía del GIR, Froilán Jiménez, quien murió durante el operativo de “rescate” al presidente. En 2019, se
intentó posicionar la figura del periodista Freddy Paredes, herido por una pedrada en la cabeza, como muestra del vandalismo de los