Anclados en arena movediza
Resumen
A veces llegan tufos de orfandad
olor a lago seco, a letra muerta.
Frente al espejo miro con la impaciencia antigua
del niño que quedó
atrapado entre cuadernos deshojados,
y procuro encontrar en mis pupilas
la ruta y el paisaje que quedaron atrás,
anclados en arena movediza
y solo alcanzo a ver
bruma multiplicada que paraliza y mata
con su loco zumbido de moscas y abejones.
El viento va llevando primitivas canciones
del mendigo que tiene su patria a la intemperie.
Eran sílabas átonas las que escribió el perjuro,
palabras extraídas de viejos diccionarios,
eran notas agudas del salmo de Caín,
semillas de olas turbias que un día germinaron
sin lluvias y sin sol
entre la muchedumbre acicateada
por el hambre de sesgos y poder.
Yo miro con asombro al palabrero
que siembra letras muertas en el surco
de la confianza ajena.