Trabajo práctico de clínica, sobre Uricemia normal en Quito
Resumen
El ácido úrico en la sangre, proviene de la degradación de las sustancias azoadas. Durante mucho tiempo se creyó que el ácido úrico provenía de la imperfecta combustión de las materias proteicas y que representaría un estado intermedio en el metabolismo azoado detenido antes de alcanzar su último período, la UREA. Hoy se admite que el ácido úrico proviene, por lo menos en su mayor parte, no de la degradación de las albúminas en general, sino que sólo de los núcleos proteidos. Los núcleos proteidos son sustancias que se semejan a las proteínas, por estar integrada su molécula, en su mayor parte, por los componentes característicos de la materia albu- mínóídea; pero, además, contiene otros grupos, en particular la llamada Purina, que, como veremos, tiene un metabolismo especial. Por la acción de los ácidos, los núcleos proteidos se desdoblan en una proteína y una nucleína, que constituye la parte más importante del núcleo celular y que contiene fósforo en gran cantidad; la nucleína, a su vez, bajo la influencia de los álcalis, se descompone en una proteína simple y ácido nucleínico, que encierra todo el fósforo de la cnuleína; este ácido, por hidrólisis, sometido a la influencia de los ácidos minerales diluidos y a la temperatura de la ebullición, se descompone en sus nucleótídos, que están formados por restos fosforados, hidratos de carbono, que pueden ser pentosas, exosas o combinadas entre sí, bases pírídícas, que contienen el núcleo de la Pírídina; bases xántícas o púrícas que contienen el núcleo de la purína. Estos nucleótídos pierden sus restos fosforados y dan lugar a los nucleósídos, cada uno de los cuales está constituido por el núcleo hidro carbonado, unido a una base púríca o pirídíca; por último, queda la base púríca sola, que sí es una oxípurína, como la hípoxantína, se transforma por simple oxidación en ácido úrico.